Y doler duelen los sentidos encumbrando el teorema que un día fue nuestro, recalcitrante estratagema de buscar palabras de consuelo deshilvanando la noche eterna de quien se sabe esperanzado. Vivir es un dolor constante que se nos olvida con esas pequeñas treguas idealizando la felicidad. Aun así dormirá el dolor que no sera suficiente para lograr al despertar deslumbrara el camino a seguir, reinventar sin excusas un nuevo lugar donde descubrir que por mucho dolor, una sonrisa, nos ayudara a disipar las lágrimas que a escondidas o resbalando por nuestras mejillas se empeñan en demostrarnos lo contrario.
Un beso de ranita, ranita... si no se cura hoy, seguro, que mañana sanara...
Solo tienes que pensarlo, es el primer paso para creerlo, es el primer paso para continuar siendo parte del todo por el todo...
Entre jazmines bajo el azul del cielo, llegan mis mejores deseos, en naranja atras de la misma verdad...


Muchas veces depositamos nuestros sentimientos en los corazones de las personas que pasan y las que forman parte de nuestras vidas, dejando gotas de alegría, tristeza, sonrisas y lagrimas. A veces nos equivocamos con las personas a las ofrecemos esos sentimientos y eso nos deja una sensación de temor en volver a confiar

Te mando besos entre mis sueños porque hablarte no puedo